miércoles, 11 de septiembre de 2019

LOS ALUMNOS DE EDUCACIÓN FÍSICA VISITAN UN ESPACIO PARA LA MEMORIA EN MUNRO


   En el marco de las asignaturas Pedagogía y Filosofía y el proyecto Pedagogía de la Memoria que lleva adelante el Instituto Superior de Formación Docente Nº 39 "Jean Piaget" los alumnos de primer año del Profesorado de Educación Física el miércoles 4 de septiembre a las 18 hs. visitaron la Casa de la Memoria y residencia Jorge “Nono” Lizaso, una unidad básica de la década del 70, ubicada en Bartolomé Mitre 1985 de Munro, acompañados por las docentes Laura Contreras, Silvina Drube y María Eugenia Miguez.

    La historia de militancia y organización popular de esa casa está atravesada por la del territorio en que se emplaza, ya que en la zona oeste de Vicente López, en la localidad de Munro, funcionó uno de los espacios en que una masa de trabajadores se organizó políticamente, debatió ideas, pensó un proyecto de país y lo puso en acción a través de la militancia.


    La casa se inauguró como espacio de la militancia de la juventud peronista en 1972 en el marco del “lucha y vuelve”.

    Jorge “Nono” Lizaso fue hijo de una familia de históricos luchadores peronistas de la zona.  En 1946 el padre de Jorge, Pedro Lizaso fue el primer intendente peronista de Vicente López y su hermano Carlos fue uno de los fusilados de José León Suárez en 1956.

       La acción política estaba destinada principalmente a los trabajadores: Un representante de la casa nos contó que aún recuerdan las volanteadas a las seis y media de la mañana en la esquina de Ader y Vélez Sarsfield, paso obligado de los obreros que iban hacia los talleres de la zona oeste de Vicente López.

    Los militantes eran todos muy jóvenes al punto de que a Jorge Lizaso le decían el “Nono” porque era el referente de más edad, pero en el momento en que se abre la casa tenía menos de 40 años”

    En abril de 1976 fueron desaparecidos y asesinados 25 integrantes de la columna norte de montoneros, entre ellos el “Nono”.

   A partir del cierre, el edificio se mantuvo siempre tapiado y su comprador lo conservó intacto y vacío.

   En 1998 la pusieron a la venta, esto movilizó a un grupo de vecinos y militantes que decidieron ocuparlo para recuperarlo como espacio para la memoria. Luego de una batalla judicial, fue recuperado, refaccionado y abierto al público.


  Actualmente además  de reflejar lo sucedido en esa época, participa de las acciones por la Memoria, Verdad y Justicia.

 Durante el año recibe a colegios para dar visitas guiadas y en el mes de marzo de cada año se organiza el “siluetazo”  en conmemoración de los desaparecidos.


Cobertura periodística realizada por Facundo Abrahán y Antonella Benítez, estudiantes de 1º 1ª del Profesorado de Educación Física

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